jueves, 5 de junio de 2025

Mustang-Mastang, la Tierra de la Luna

El reino de Mustang-Mastang (reino de Lo) fue fundado en el año 1380, su capital es Lo Mantang (3840 metros de altitud). A caballo entre Nepal y Tíbet, hasta hace relativamente poco, estaba herméticamente recluido entre sus montañas y sus tierras esteparias del resto del mundo durante milenios. De apenas nueve mil habitantes, el acceso a estas tierras estaba prohibido para los extranjeros y actualmente es necesario un permiso especial para acceder a este reino.

Del libro Mustang - Reino prohibido en el Himalaya de Michel Peissel (Paris 1937-2011).

- Allí moran los dioses y allí han ido a morir durante miles de años sacerdotes, monjes y sabios. Hace muchos siglos que el Himalaya fascina a los hombres; sus altivos picachos siguen escondiendo muchos misterios.

10-09-2024

Hoy hemos llegado a Chhusang (2980 metros de altitud). Reflexión: quién me mandaría a mí poner un pie, o ambos, en este berenjenal. En este secarral no crecen las berenjenas, solamente crecen las sombras y debajo de las piedras exclusivamente. Las sombras protectoras mitigantes del calor en esta tierra yerma caminan a nuestro lado, y el sol prendido en un cielo azul puro es un monarca “absolutista”. Ni genuflexos acude a nuestro socorro.

Reino de pureza,
tierra labrada.
Belleza sobrenatural.

- Allí está Mustang - le dije señalando orgullosamente al Norte- ¿Verdad que es hermoso?

- No es hermoso - repuso Tashi con desprecio, sin dignarse apenas mirar el admirable panorama -. Todo son piedras; es un país seco, horrible. ¿Qué hace ahí la gente? ¿Comer piedras? Seguramente es un país desgraciado.

Michel Peissel, después de recibir la autorización para realizar una expedición, pudo acceder a Mustang en el año 1964. Escribió su libro en el año 1967.

11-09-2024

El proceso de aclimatación en Tsarang o Charang (3630 metros de altitud) me ha permitido recuperar las buenas sensaciones físicas. El “mal de altura” estaba llamando para quedarse y condicionarlo todo. Ahora he podido disfrutar de la sonrisa de los lobas (etnia tibetana) y de su hospitalidad - ha sido una bendición deificante y reparadora -. El agua en este lugar es abundante, mana en glaciares lejanos y, con la complicidad del viento, se abre paso horadando montañas, rocas y tierras. Desfiladeros y torrentes atronadores como una tormenta seca de verano crean en los márgenes de esas corrientes vertiginosas y en complicidad con el limo que arrastran, auténticos vergeles de un rico y profundo color verde esmeralda. Pero en estos lugares nada existiría sin la complicidad persistente de sus pobladores. De alguna manera es un camino de eternidad en común. Es un acuerdo no escrito entre la Naturaleza salvaje y agresiva y sus moradores sabiéndose (ambos) ser poseedores de un equilibrio espiritual. Todos los días realizan ofrendas antes de trabajar la tierra, al respirar su aire puro, al disfrutar de sus frutos, y antes del sueño reparador. Entonces, parece que el tiempo se detiene y, en armonía con las volutas de un té de mantequilla, observan sus manos curtidas (trabajo y tiempo en paz) llevándoselas a sus rostros formados por surcos (su historia personal) y una tez bruñida, dan las gracias por su existencia.

- Me tomé una Acetazolamida para combatir el mal de altura (prescripción facultativa). Casi al instante comenzó a manar "la fuente" (aguas menores le llaman), provocando varias visitas nocturnas a un agujero negro.  Y solo fue una cápsula. Quizás lo que funciona es la “cápsula del tiempo” para poder atesorar tanta belleza. Tsarang es magia, es fascinación. Su Palacio Real todavía posee tesoros y misterios ocultos (silencios ululantes). Al amanecer del segundo día las cumbres de las montañas que rodean este lugar (sin poder contener su historia) amanecieron cubiertas de un manto níveo. Es alquimia pura la combinación de la purpúrea luz solar y el viento céfiro que mece la mies no cosechada.

- Casi no podía dar crédito a mis ojos. Tsarang era como una delicada miniatura ejecutada por un minucioso ilustrador de cuentos infantiles. Sobre una cresta, dominando una escarpada garganta, se alzaba un castillo de cinco pisos… Pero lo que más llamaba la atención al forastero era el brillo de los ojos de todas aquellas gentes, y también la expresión de sus rasgos. - Michel Peissel -

Mañana a Lo Mantang.

Hoy he conocido en el Lotus Holiday Inn, un Guest House, a una himalayista nepalí. Se llama Gorhka Nanu Maya Gurung. Cuatro ochomiles logrados, no conquistados. A las montañas no se las conquista: Everest, K2, Loche y Manaslu. “Cuatro ochomiles", y yo todos los días llego derrengado (old men). También he conocido a una artista (acuarelista) francesa, Claud Alegre. Quizás en un futuro próximo hagamos una exposición conjunta. 

“Las fortalezas intactas son las del Espíritu. Las “otras” las destruyen las aguas y los vientos: nada permanece todo se transmuta”. 

Es época de recolección: cebada, trigo y mostaza La mostaza es para hacer aceite de cocina.

Ora pro nobis,
caminando.
Luna creciente.

 

Offering Chant – Canto de ofrenda.




























sábado, 8 de marzo de 2025

COMPOSTELA A FISTERRA Y MUXÍA (YA EN MUXÍA)

Cuaderno de viaje o bitácora terrestre.

16-01-2025

Me encuentro en Muxía, en el kilómetro cero, al lado de  la ermita de la Virxen de la Barca. Esta tarde volveré en bus a Compostela, y mañana a "casita" por enero. Ahora mismo, aunque un poco triste por tener que marchar, estoy gozando de estar  en Muxía. En este punto ya todo se cumplió y he recordado la luz del alba: rojo pasión. Es mediodía y toca picnic gastronómico en el puerto, contemplando un mar de ensueño y recomponiendo los girones de un alma etérea. Las emociones ya volverán a su estado natural. En la dársena, las bucetas al pairo, cimbreadas por la marea, están vacías de pesca, y los pescadores, ausentes, en reposo pero no inmóviles. Es pleamar. Estoy sentado en un banco de piedra caliza, atemperada por el sol de invierno, deconstruyendo un señor "bokata" con productos decomisados de los anaqueles de una tienda de ultramarinos: chorizo de Iruña entre pan y pan de hogaza, desbordando su perímetro, y acompañado de burbujas de morro chispeante como ayuda para prevenir atragantamientos contemplativos: mixturas del sol de enero con brisas marinas. ¡Creo que nunca he gozado tanto! Y ya está bien de palique por hoy, ¡sacabó!

Azul,
espejo.
Cielo y mar.

Siempre queda algo que contar.

Desde ayer he compartido momentos con un peregrino holandés. Se llama Gijs, y tiene veinticinco años. Comenzó su peregrinaje el tres de octubre del veinticuatro. Salió desde Namur en Bélgica. Hemos llegado juntos a Muxía este quince de enero del veinticinco. Sacad cuentas. ¡Y peregrinando solo! Hace dos años comenzó su peregrinaje en Maastricht (Países Bajos) hasta Namur. Parada y vuelta a su casa esperando el nuevo momento para volver al Camino. Parafraseando de alguna manera han venido a mi memoria el pintor Joaquín Sorolla y el título de una de sus obras “Y luego dicen que el pescado es caro”. 

Hoy llevaba en mí macuto en bandolera una lata de “fogras”. Por la acera de enfrente, ya cerca del albergue, iba un hombre caminando junto a un perro lastimoso con su costillar a flor de piel. Iban unidos por una cuerda -vidas compartidas- Les he dado el “fogras”.

Perro saltando,
hombre feliz.
¿Cuál de los dos?

17-01-2025

“En los camelios florecen las camelias…”

Me acabo de “tumbar” una dorada de 800 gramos, casi kilos, con la ayuda de un albariño Xenxebre 23 ¡Padre, he pecado! El Canónigo: pues en penitencia haga usted de nuevo el Camino. ¡Amén! El Canónigo a lo suyo: reposo total con siesta de pijama y orinal. Que nunca se sabe.

“Sin olvido no hay recuerdo”

Remembranzas.

Toda una jornada en Santiago de Compostela sin mochila. Se ganó el reposo. Por un olvido mío y la cámara de fotos ausente en combate, un milagro tomó forma como un acto mágico y sacramental: disfrutar sin medida y sin limitación de tiempo de la ciudad compostelana como nunca antes había disfrutado: pura contemplación visual, palatial y gustativa.

Se preguntarán a que se debió tal disfrute. Pues a que no traje el cargador de baterías, y que yo sepa ni por “ciencia infusa” la maquina se activa. Baterías agotadas. Mucho mejor, está vez mucho mejor. ¡Así sea! 

“Sesenta veces siete…”

El amor restaura, el amor permanece, el amor cura, el Amor siempre respira. Cuando los caminos se bifurcan, todo permanece.

Siete, en numerología tiene un significado espiritual. Nos llevará hacia los caminos de la búsqueda de la comprensión y la interpretación del mundo y el Universo que nos rodea: sobre lo divino y lo humano.

“Una rosa sin espinas es como la vida sin amor”

De Compostela a Muxía todo es Luz, y todo es todo. Muxía, pedras (piedras) sacras.

28-02-2025

- De una relación epistolar.

“Recibí tu correo en vísperas de la Navidad, y aunque pensé responderte una vez pasadas esas fechas, la acumulación de mensajes en la bandeja de entrada sepultó el tuyo en lo hondo del correo, y pese a haber recordado algunas veces que tenía esta tarea pendiente, siempre tenía algo aparentemente más importante que hacer. Dos largos meses después, que rápido se dice, creo que ha llegado el momento de agradecerte el envío de tus fotografías. Menos mal que tú eres un buen fotógrafo, porque por el modelo lo tenías difícil. 
A propósito del nombre del lugar donde yo estaba y me tomaste las fotos este es Puerta del Palacio Arzobispal, o de Xelmirez. Así consta en una placa que hay en su entrada.
Como veo en tu blog que eres un peregrino, seguro que ya has comprobado que el paisaje humano de los lugares que visitas es el que hace las experiencias realmente distintas. En mi opinión, los lugares pueden ser más o menos bonitos, y tocarte, pero, a mí entender, es la gente que hace el viaje y los recuerdos más vividos los que provocan rescoldos incandescentes colmados de emoción que anidan en los pliegues de un alma inmortal. La del peregrino. 

Con respecto al Camino, al vivir justo a la entrada del francés, en los últimos años he podido ver una cierta degradación en el tipo mayoritario de personas que lo recorren. Por supuesto que hay peregrinos. Lo que pasa es que antes era excepcional el senderista y ahora lo es el peregrino. Al menos en los meses centrales del año, cuando el buen tiempo hace más fácil el trayecto. En fin, como todos esos lugares visitados más allá de su capacidad, en Santiago ya hace tiempo que se ha superado el umbral de la normalidad, y se está quedando en un decorado para los visitantes, al menos durante esa época de mayor afluencia. He ejercido de hospitalero voluntario en dos ocasiones, y amigos que se echan al Camino a la primera oportunidad comparten mi opinión.
Yo también espero que la fábrica de papel que, contra viento y marea se han propuesto instalar en el corazón de Galicia no se lleve a término, pero mucho me temo que el poder del dinero está por encima del sentido común, y los últimos tiempos no hacen más que confirmar ese temor.
En cualquier caso, bihotzetik bihotzera, recibe un fuerte abrazo.
Y lo dicho, si recalas de nuevo por aquí, no dejes de contactar conmigo”.

Hasta pronto.
Fernando.

Vanitas vanitatum omnia vanitas (Vanidad de vanidades, todo es vanidad)
¡Volad, que la vida es un vuelo de eternidad!