martes, 11 de noviembre de 2025

THE GREAT HEROES OF THE HIMALAYAS


 

The Porters of the Sky 

From the Heart Sutra.

‘There is no suffering, no origin of suffering, no cessation of suffering, no path, no wisdom, no achievements, no non-achievements.’

It is raining,

there are no birds in the sky,

nor dogs on the ground.

They have flown away.

Can beauty be terrifying? The reactions it provokes, sometimes driven by pure emotion, are irrational. I'm not talking about Stendhal syndrome. Someone offered a philosophical and psychological explanation to understand a reaction stemming from an emotional pathology. Philosophy and psychology can help interpreting some emotions, but can it help us discerning our reactions? The beauty of Nature is one of them. And what about the Nature of Human Being?

To meet their challenges, mountaineers need porters to carry all the expedition's equipment and supplies on their backs (and then some). They are paid around seventy-five dollars a day for this work. Furthermore, by contract, they cannot carry more than thirty kilos (data obtained from the Cloud).

Today, near Jorsalle, we asked two porters about their loads. Norbu, a young man of twenty-two, carried ninety kilos on his back. Beads of sweat trickled from the tip of Norbu's nose, one drop lingering, its motion shimmering silver in the morning light. The other porter, Lobsang, is twenty-six years old. His load: ninety-two kilos. Of course, we didn't dare ask about the earnings from their labor. Their load: everything needed to supply two guesthouses. Among other necessities, they carried toilet paper, noodles for making chouin, even fizzy drinks! and bottles of mineral water. One of the guesthouses, and to be honest, a real gem, is called The Garden of Nirvana.

There is a Buddhist story called the Legend of the Four Friends. In thangkas (paintings on canvas), a white elephant is depicted. On its back, a monkey. On the monkey's head, a rabbit. And finally, on the monkey's head, a bird (sometimes a pheasant). An aristocracy of living beings, all working together without distinction. They are four friends. Different from one another, yes, but on a common path: knowledge and wisdom in the pursuit of enlightenment. This, as I believe you will have understood, is a karmic metaphor.

Silence broken,

eternal fire.

Juniper wind.

‘On a higher plane, the sky, the clouds, and storms of rain and snow; also of freezing wind. On the lower plane, at ground level: fatigue, stiffness, and lower back pain of mischievous ambiguity. Take your pick...’

The pain continues. They walk in silence. Sometimes they rest. And from time to time, they look up at the sky. And if anguish had a name, it would not be that of the mountain peaks (Everest, or some other, who knows) that pierce the blue skies, or the clouds broken by stormy grey. Or perhaps the clouds of silver rain. Their name: Porters.

“Perhaps flowers bloom through sweat and blood.”

 

Rebellious dreams,

flying hearts.

Influence of the Moon.

 


Los Porteadores del Cielo

Del Sutra del Corazón.

“No hay sufrimiento, ni origen del sufrimiento, ni cese del sufrimiento, ni camino, ni sabiduría, ni logros, ni no logros”.

Está lloviendo,

no hay pájaros en el cielo,

tampoco perros en la tierra.

Han volado.

¿La belleza puede ser terrorífica? Las reacciones que provoca, a veces, por pura emoción son irracionales. No hablo del síndrome de Stendhal. Alguien dio una explicación filosófica y psicológica para comprender una reacción derivada de una patología emocional. La filosofía- psicológica puede ayudar a interpretar algunas emociones, ¿pero puede contribuir a discernir sus reacciones? La belleza de la Naturaleza es una de ellas. ¿Y la Naturaleza del Ser Humano?

Para hacer frente a sus desafíos, los alpinistas necesitan de los porteadores para que lleven sobre sus espaldas (y algo más) todos los equipos y vituallas de las expediciones. Por este trabajo cobran alrededor de setenta y cinco dólares al día. Además, por contrato, no pueden cargar con más de treinta kilos (datos recogidos de la nube informática).

Hoy, cerca de Jorsalle, hemos preguntado a dos porteadores por su carga. Norbu es un joven de veintidós años: lleva noventa kilos sobre sus espaldas. A Norbu, al final de su apéndice olfativo le caían gotas de sudor y, una gota no terminaba de hacer su recorrido: quieta ella, trasparentaba la luz matutina de plata irisada. Lobsang se llama el otro porteador, y tiene veintiséis años. Su carga: noventa y dos kilos. Por supuesto, no hemos cometido la osadía de preguntar por los dividendos derivados de su trabajo. Su carga: todo lo necesario para abastecer a dos establecimientos hosteleros (Guest Hauses). Entre otras “necesidades”, papel para el WC, fideos para hacer los choumin´s, ¡incluso refrescos burbujeantes! and bottles of mineral water. Uno de los Guest Hause, y siendo sincero, una verdadera gozada, se llama The Garden of Nirvana (El Jardín de Nirvana).

Hay un relato budista que se llama la leyenda de los cuatro amigos. En los thangkas (pinturas realizadas sobre lienzos) se representa un elefante blanco. Sobre su lomo, un mono. Sobre la cabeza del mono, un conejo. Y al final, sobre la cabeza del conejo, un pájaro (a veces es un faisán). Aristocracia de seres vivos y sin diferencias colaborativas. Son cuatro amigos. Dispares entre ellos, sí, pero en un camino común: el conocimiento y la sabiduría en la búsqueda de la iluminación. Esto, como creo que lo habréis comprendido, es una metáfora kármica. 

Silencio roto,

fuego eterno.

Viento enebro.

 

“En un plano superior, el cielo, las nubes, y las tormentas de agua y nieve; también de viento helador. En el plano inferior, a ras de suelo: cansancio, agujetas y lumbares de ambigüedad traviesa. A elegir…”

El trasiego de dolor continua. Van en silencio. A veces descansan. Y de cuando en vez: los ojos al cielo. Y si la angustia tuviera nombre no serían los de las cimas de las montañas (Everest, o alguna otra, a saber) que penetran los cielos de luz azul, o las nubes roturadas de gris tormenta. O quizás las nubes de lluvia plateada Su nombre: Porter-Porteadores.

“Quizás las flores brotan por el sudor y la sangre”

 

Insumisos sueños,

corazones voladores.

Influjo de Luna.

 

Pragya Sutra | Jai hos | Batas Chalyo | Phool ko Aakha ma | Symphony of Wisdom - Ani Choying Drolma

“Our intention is to spread love and compassion through music”.

“Nuestra intención es difundir el amor y la compasión a través de la música”.






























jueves, 5 de junio de 2025

Mustang-Mastang, la Tierra de la Luna

El reino de Mustang-Mastang (reino de Lo) fue fundado en el año 1380, su capital es Lo Mantang (3840 metros de altitud). A caballo entre Nepal y Tíbet, hasta hace relativamente poco, estaba herméticamente recluido entre sus montañas y sus tierras esteparias del resto del mundo durante milenios. De apenas nueve mil habitantes, el acceso a estas tierras estaba prohibido para los extranjeros y actualmente es necesario un permiso especial para acceder a este reino.

Del libro Mustang - Reino prohibido en el Himalaya de Michel Peissel (Paris 1937-2011).

- Allí moran los dioses y allí han ido a morir durante miles de años sacerdotes, monjes y sabios. Hace muchos siglos que el Himalaya fascina a los hombres; sus altivos picachos siguen escondiendo muchos misterios.

10-09-2024

Hoy hemos llegado a Chhusang (2980 metros de altitud). Reflexión: quién me mandaría a mí poner un pie, o ambos, en este berenjenal. En este secarral no crecen las berenjenas, solamente crecen las sombras y debajo de las piedras exclusivamente. Las sombras protectoras mitigantes del calor en esta tierra yerma caminan a nuestro lado, y el sol prendido en un cielo azul puro es un monarca “absolutista”. Ni genuflexos acude a nuestro socorro.

Reino de pureza,
tierra labrada.
Belleza sobrenatural.

- Allí está Mustang - le dije señalando orgullosamente al Norte- ¿Verdad que es hermoso?

- No es hermoso - repuso Tashi con desprecio, sin dignarse apenas mirar el admirable panorama -. Todo son piedras; es un país seco, horrible. ¿Qué hace ahí la gente? ¿Comer piedras? Seguramente es un país desgraciado.

Michel Peissel, después de recibir la autorización para realizar una expedición, pudo acceder a Mustang en el año 1964. Escribió su libro en el año 1967.

11-09-2024

El proceso de aclimatación en Tsarang o Charang (3630 metros de altitud) me ha permitido recuperar las buenas sensaciones físicas. El “mal de altura” estaba llamando para quedarse y condicionarlo todo. Ahora he podido disfrutar de la sonrisa de los lobas (etnia tibetana) y de su hospitalidad - ha sido una bendición deificante y reparadora -. El agua en este lugar es abundante, mana en glaciares lejanos y, con la complicidad del viento, se abre paso horadando montañas, rocas y tierras. Desfiladeros y torrentes atronadores como una tormenta seca de verano crean en los márgenes de esas corrientes vertiginosas y en complicidad con el limo que arrastran, auténticos vergeles de un rico y profundo color verde esmeralda. Pero en estos lugares nada existiría sin la complicidad persistente de sus pobladores. De alguna manera es un camino de eternidad en común. Es un acuerdo no escrito entre la Naturaleza salvaje y agresiva y sus moradores sabiéndose (ambos) ser poseedores de un equilibrio espiritual. Todos los días realizan ofrendas antes de trabajar la tierra, al respirar su aire puro, al disfrutar de sus frutos, y antes del sueño reparador. Entonces, parece que el tiempo se detiene y, en armonía con las volutas de un té de mantequilla, observan sus manos curtidas (trabajo y tiempo en paz) llevándoselas a sus rostros formados por surcos (su historia personal) y una tez bruñida, dan las gracias por su existencia.

- Me tomé una Acetazolamida para combatir el mal de altura (prescripción facultativa). Casi al instante comenzó a manar "la fuente" (aguas menores le llaman), provocando varias visitas nocturnas a un agujero negro.  Y solo fue una cápsula. Quizás lo que funciona es la “cápsula del tiempo” para poder atesorar tanta belleza. Tsarang es magia, es fascinación. Su Palacio Real todavía posee tesoros y misterios ocultos (silencios ululantes). Al amanecer del segundo día las cumbres de las montañas que rodean este lugar (sin poder contener su historia) amanecieron cubiertas de un manto níveo. Es alquimia pura la combinación de la purpúrea luz solar y el viento céfiro que mece la mies no cosechada.

- Casi no podía dar crédito a mis ojos. Tsarang era como una delicada miniatura ejecutada por un minucioso ilustrador de cuentos infantiles. Sobre una cresta, dominando una escarpada garganta, se alzaba un castillo de cinco pisos… Pero lo que más llamaba la atención al forastero era el brillo de los ojos de todas aquellas gentes, y también la expresión de sus rasgos. - Michel Peissel -

Mañana a Lo Mantang.

Hoy he conocido en el Lotus Holiday Inn, un Guest House, a una himalayista nepalí. Se llama Gorhka Nanu Maya Gurung. Cuatro ochomiles logrados, no conquistados. A las montañas no se las conquista: Everest, K2, Loche y Manaslu. “Cuatro ochomiles", y yo todos los días llego derrengado (old men). También he conocido a una artista (acuarelista) francesa, Claud Alegre. Quizás en un futuro próximo hagamos una exposición conjunta. 

“Las fortalezas intactas son las del Espíritu. Las “otras” las destruyen las aguas y los vientos: nada permanece todo se transmuta”. 

Es época de recolección: cebada, trigo y mostaza La mostaza es para hacer aceite de cocina.

Ora pro nobis,
caminando.
Luna creciente.

 

Offering Chant – Canto de ofrenda.