Caminos de la Luz: Año Santo (dos)

De Zumaia-Askizu-Getaria (y vuelta)

From Zumaia-Askizu-Getaria (and return)

Transcripción literal de los textos de tres carteles colocados al borde del Camino en este recorrido. Conviene leerlos con detenimiento, asimilando bien los conceptos.

“El Camino de Santiago por Getaria”

La primera mención al Camino de Santiago a su paso por Getaria es de 1494. Aquel año llegó a la localidad el armenio Martir, obispo de Arzendjan, procedente de Compostela. En Getaria embarco en un navío que, según su capitán, iba a zarpar sin carga en misión de descubrimiento: “… voy a navegar a través del océano (…). Vamos a navegar alrededor del mundo; no podemos indicar a dónde nos conducirán los vientos, sólo Dios lo sabe…”. Tras zarpar el 8 de abril de 1494, navegaron por el océano durante 68 días antes de recalar en Finisterre. El testimonio del obispo Martir constituye, además, una prueba de la confluencia de los caminos de Santiago marítimos y terrestres en puertos vascos como Getaria.

Estas expediciones particulares armadas en Getaria debieron influir en su más ilustre vecino, el joven Juan Sebastián Elcano, quien entre 1519-1522 culminaría la primera circunnavegación de la tierra.

Otro de los susodichos carteles que encontramos al borde del Camino dice así:

El Camino de Santiago por la ruta de la costa discurre por Getaria a través de 750 m de un antiguo tramo de calzada empedrada. Además de esta calzada, como hitos principales en su recorrido destacan la ermita de San Prudencio, la parroquia de San Martin de Askizu y el caserío Benta.

Exceptuando el tejado, rehabilitado hace un tiempo para evitar filtraciones de agua, el caserío Benta se encuentra en un lamentable estado de “ruina”.

Otro de los carteles hace referencia a la “Estación megalítica de Meagas” cuyo elemento principal es el llamado túmulo de Arriaundi.

Estructura funeraria megalítica erigida por grupos de tradición pastoril durante las Edades del Cobre y del Bronce, hace ahora entre 5000 y 3000 años.

Conocidos popularmente como “jentiletxeak”, se construyen por un amontonamiento ordenado de piedras y tierra de base circular.

En su interior pueden contener inhumaciones (en un pequeño recinto de losas techado, o cista) o restos de cremaciones (introducidos en una urna de piedras, en una cerámica o en un agujero practicado en el terreno), junto a objetos de uso común y de ofrenda. Los depósitos cenizales se realizaban también en otras zonas del túmulo.

El conocimiento de la existencia de este Patrimonio Monumental resulta imprescindible para comprenderlo y disfrutarlo como herencia del pasado, además de para procurar su conservación y propiciar su transmisión en las mejores condiciones a las generaciones venideras…

Y al final del cartel aparecen los escudos oficiales de Getariko Udala y del Gobierno Vasco…

Cerca del túmulo se encuentra la “Peña Grande”, conocida popularmente en la zona como "Amabirjinaren Oinatzak” (las Pisadas de la Virgen). Esta leyenda alude y se basa en unos petroglifos de la Peña.

Como parece que tiene que haber de todo, el artista de turno ha pintado un graffiti con el símbolo hippie de la paz en color rojo sobre la Peña. Ese símbolo lleva ahí bastantes años ya, para escarnio general. Mi pregunta: ¿Para cuándo su restauración-eliminación?

Ya para terminar, hablemos de las calzadas.

No se sabe a ciencia cierta sin son romanas, medievales, camino real… Han sido sistemáticamente alteradas o destruidas por intereses económicos privados. Engullidas por la grava, en grandes cantidades y de gran tamaño. O por el cemento, el asfalto, la arena… En muchos tramos la calzada ha desaparecido… Y a día de hoy continúa el expolio. El Camino de Santiago, ¿no debería ser acaso un espacio protegido?

Los tramos de las calzadas, sus nombres, están basados en datos históricos. Una de ellas era la que iba de Zarautz a Getaria. Otro tramo de la calzada era la de Askizu; actualmente ni rastro, todo debajo del asfalto. La calzada romana de Santa Barbara, o Calzada de la Costa, era otra de sus denominaciones. Entre estos antecedentes históricos aparece la llamada calzada romana que unía el Bidasoa con Galicia por el monte Garate... Y aunque carece de veracidad histórica, toda esta red de calzadas podría formar parte de la Via Agrippa. También en estas crónicas antiguas hay referencias a una calzada que iba de Getaria hacia el interior de la Península Ibérica.

Muchas de las piedras que las constituían forman parte ahora de los muretes que jalonan el Camino en esta zona. Otras, han desaparecido definitivamente.

Pero lo terrible de todo esto es que las máquinas han ocultado los restos arqueológicos, los han tapado para siempre, o los han destruido. Cuando se ha llevado a cabo alguna obra, antes, no se han realizado “catas” de forma científica. Y cuando se ha hecho ha habido que taparlas…

Todas estas calzadas atesoran una riqueza arqueológica de relevancia histórica. Insisto, creo que, todavía sin estudiarse de forma rigurosa, para protegerlas. Quizás para rehabilitarlas.

Las primeras culturas poblacionales construían los caminos para desplazarse y unir diferentes puntos geográficos para tener contacto con otras culturas buscando su propia evolución. El Camino de Santiago unió pueblos, países y culturas de extraordinaria riqueza social y artística. Cuando una civilización desaparecía, por extinción o evolución, las nuevas civilizaciones, construían sus caminos sobre los trazados anteriores en el tiempo. Y así hasta nuestros días.

Pueden pensar, o mejor dicho, discernir, sobre lo que se podría hallar en los estratos inferiores de estas calzadas ¿Y en toda la zona?

Siempre conté hasta diez.

Nunca apareciste.

Los párpados cansados,

una mirada extraviada.

Otra vez suenan las campanas.

Hans Zimmer – Time, La hora. Interprete, Eiro Nareth (guitarra)